Aún así, Theresa May no ha dimitido, ni ha anunciado un retraso sobre la fecha de salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), pero sin embargo, su futuro podría decidirse mañana mismo, con una moción de censura.
Con 432 votos en contra, May no ha tenido más remedio que aceptar su derrota y adelantarse a la moción de censura interpuesta por el líder de la oposición británica, el laborista Jeremy Corbyn.
Para sacar adelante la moción de censura, Jeremy Corbyn necesita del apoyo de todos los partidos de la oposición, más algún diputado conservador, para lograr la cifra de 326 diputados que derroquen a May.
En la calle, el público no perdió ocasión para reivindicar la postura preferida, en favor o en contra del Brexit, con una gran puesta en escena por parte de aquellos que buscan quedarse en Europa.
Con 432 votos en contra, Theresa May ha sufrido la mayor derrota en la historia del Parlamento y con ello ha marcado su legado como la primera ministra que no pudo sacar al Reino Unido de la UE.
Ahora bien, con la moción de censura interpuesta por el líder de la oposición, la situación del Brexit, como la de la primera ministra están más en el aire que nunca.
Ian Díez, Londres.
mhn/nii/