“A largo plazo, sobre todo a medida que el Departamento planea ayudar a la recuperación y reconstrucción de Ucrania, la corrupción en el Gobierno ucraniano y en el sector privado plantea riesgos para la eficacia de la ayuda exterior de EE.UU., pues requieren una supervisión robusta”, señaló el jueves el inspector general del Departamento de Estado, mediante un informe, titulado ‘Revisión de la coordinación y supervisión de la ayuda exterior a Ucrania’.
Como ejemplo de la referida corrupción, la oficina del inspector general logró detectar que la sede diplomática de Ucrania en el país norteamericano no había actualizado su Estrategia Integrada de País [ICS, por sus siglas en inglés], sin la cual, “las oficinas del Departamento de Estado y otros organismos carecen de orientación para diseñar programas e indicadores de rendimiento alineados con los objetivos estratégicos comunes”, explica.
Ante esta tesitura, el periodista estadounidense Seymour Hersh denunció el mismo jueves que Washington no sabe qué hacer con Zelenski y su círculo, citando una relevación que le había hecho un funcionario norteamericano. “Zelenski no tiene ningún plan, excepto aguantar”, comentó.
“Ucrania es el Gobierno más corrupto y tonto del mundo, (...) y el apoyo de [presidente de EE.UU. Joe] Biden a Zelenski solo puede provenir del conocimiento que Zelenski tiene de Biden, y no solo porque cuidaba al hijo de Biden”, agregó un artículo del periodista.
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El Congreso estadounidense ha asignado 45 400 millones de dólares al Departamento de Estado y a la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) a fin de suministrar la asistencia militar para las operaciones de Ucrania, incluyendo ayuda humanitaria y la continuidad de la contraofensiva, tal como indica el informe del inspector general del Departamento de Estado.
A principios de mayo, en una entrevista al diario británico The Times, un teniente ucraniano, bajo condición de anonimato, declaró que algunos integrantes de las unidades de la reserva pretenden abandonar el Ejército ucraniano porque están disgustados con la corrupción que impide el suministro del equipo bélico necesario.
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