Según informó el martes el rotativo estadounidense Stars and Stripes, un grupo de escuadrones de aviones de combate F-15E, F-16 y las aeronaves de carga C-130, procedente de las bases norteamericanas en el Reino Unido y Alemania, aterrizaron el lunes en la Base Aérea Krzesiny, situada en el sur la localidad polaca de Poznan, para participar en unas maniobra militares.
El medio estadounidense, citando un comunicado del general Jeffrey L. Harrigian, comandante de las Fuerzas Aéreas de EE.UU. en Europa, apunta a la importancia de las maniobras a realizar con la Fuerzas Armada de Polonia.
“Las oportunidades de entrenar junto a nuestros aliados polacos son increíblemente valiosas y de importancia crítica. Las rotaciones periódicas de los destacamentos de aviación fortalecen a ambas naciones al desarrollar aviadores altamente capacitados, listos para proporcionar potencia aérea de combate, en cualquier momento y en cualquier lugar”, se señala en la nota.
El rotativo señaló que según el portavoz del Departamento de Defensa de EE.UU. (el Pentágono), John F. Kirby, los ejercicios militares en Polonia son de carácter “rutinario” y no tienen relación alguna con la coyuntura actual que se está dando en la frontera oriental de Ucrania con Crimea.
No obstante, el informe hizo eco de unas declaraciones hechas por el coronel Jason Camilletti, comandante de la 48ª Ala del Mando Aéreo de Combate (MACOM, por sus siglas en inglés) —un escuadrón aéreo operativo en la base estadounidense de Lakenheath en el Reino Unido— en las que aseguraba que las maniobras militares en Polonia están destinadas para una preparación optima ante una posible agresión a los socios y aliados europeos de Estados Unidos.
“Los ejercicios y despliegues que potencian conceptos ágiles de empleo en combate aseguran que las fuerzas en Europa estén listas para proteger y defender a socios, aliados e intereses estadounidenses en cualquier momento”, sostuvo el alto rango militar norteamericano.
Las tensiones entre Rusia y el Occidente se han incrementado en las últimas semanas, especialmente después de que Ucrania enviara varios regimientos de tropas, bajo el paraguas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), cerca del flanco occidental de la Federación Rusa. El movimiento se produce en medio de los enfrentamientos registrados entre las fuerzas ucranianas con grupos separatistas prorusos en Donbás, región situada en el este de Ucrania.
Moscú considera que cualquier despliegue de tropas de la Alianza Atlántica en la zona fronteriza con Crimea provocaría una escalada de la situación, y advierte, al mismo tiempo, que Rusia se reserva el derecho de dar una respuesta contundente a cualquier acción provocativa proveniente del Occidente.
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