“Basta de violencia racial”, los indignados realizaron multitudinarias marchas en las ciudades estadounidenses de Nueva York, Washington y Atlanta. Portando pancartas en las que leía lemas como “detengan el odio hacia asiáticos” y “el odio es el virus”, los manifestantes expresaban su preocupación por el aumento de crímenes de odio contra los asiáticos en el país norteamericano.
Lo que avivó los temores y la ola de la ira popular hacia crímenes de odio en Estados Unidos fueron los tiroteos acaecidos el pasado martes en varios spas del área metropolitana de Atlanta, que dejaron ocho muertos, seis de ellas mujeres de ascendencia asiática. La policía de Atlanta todavía está investigando el motivo en relación con los ataques fatales.
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