• EEUU, país dividido por una presidencia en decadencia
Publicada: miércoles, 5 de septiembre de 2018 7:05
Actualizada: miércoles, 5 de septiembre de 2018 8:21

En lugar de ser sinónimo de unidad nacional, el presidente de EE.UU., Donald Trump, se ha convertido en sinónimo de división entre los estadounidenses.

Dividir para conquistar... o más bien, dividir para destruir. Tal es el clima de polarización social en Estados Unidos. El arquitecto de las divisiones es el presidente: Donald Trump.

Sólo la presencia policial evita una masacre entre trumpistas y sus opositores. Este microcosmos refleja a toda la nación: crisis social, política y económica; una tierra de confusión.

Blancos y negros, de izquierda o de derecha, ricos y pobres. El mensaje se pierde entre gritos e insultos, casi siempre en contra de los inmigrantes y sus familias.

Es así que mientras Trump habla de las maravillas de su Administración, The Washington Post afirma que el 60 % de los votantes se opone al presidente, favoreciendo la posibilidad de un juicio político.

Y es que la mayor parte de los estadounidenses ya no le creen a la actual Administración por sus numerosos escándalos morales, económicos, éticos y quizás, acuerdos comprometedores a puerta cerrada.

No obstante, a pesar de la evidente polarización social, Trump persiste en su agenda: violaciones a los derechos humanos de familias inmigrantes, persecución a la prensa independiente, posicionamiento de racistas en esferas de poder y favoritismo político para las élites económicas y corporaciones, entre otros aspectos.

Marcelo Sánchez, Miami.

kmd/msf