Policías y militares irrumpiendo en la cárcel de máxima seguridad Regional de Guayaquil. Los nuevos enfrentamientos obligaron a las fuerzas de seguridad a movilizar tanques de guerra hasta el sitio. En el interior del reclusorio, los agentes fueron recibidos con balas, que los reos, disparaban desde los techos. Horas de enfrentamientos entre los uniformados y los presos, levantaron columnas de humo. Y Cuando los fusiles dejaron de sonar, se confirmó que al menos un policía resultó herido.
La regional es vecina a la Penitenciaría del Litoral, donde hace días un motín dejó a 119 muertos y más de 80 heridos. Fue el enfrentamiento más violento entre presos en las cárceles del país. Y llevó al presidente Guillermo Lasso a declarar estado de excepción en todos los centros de detención del territorio y movilizar a miles de uniformados para detener episodios de violencia tras las rejas.
Las autoridades también planean indultar a unos dos mil presos para aliviar el hacinamiento en sus centros penitenciarios.
Las cárceles de Ecuador tienen capacidad para 30 mil internos, pero hay más de 39 mil personas en privación de libertad. El impacto de las bandas criminales es tan grande que las autoridades reconocen que son “una amenaza con un poder igual o superior al del Estado.
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