El mandatario persa, Hasan Rohani, en una conversación telefónica mantenida este sábado con su homólogo ruso, Valdimir Putin, ha respaldado la tregua en el disputado enclave de Nagorno Karabaj, e insiste en que las negociaciones entre las partes en el conflicto deben continuar para acabar definitivamente con la disputa.
El pacto entre Bakú y Ereván, que se ha logrado en la madrugada de hoy tras negociaciones de casi 10 horas en Moscú, capital rusa, apadrinadas por Rusia, establece un cese de los combates por motivos “humanitarios”, lo que debería permitir un intercambio de prisioneros y la recuperación de los cadáveres que han quedado tendidos en tierra de nadie.
Rohani y Putin han aprovechado la conversación para abordar el acuerdo nuclear de 2015 suscrito por Irán y el Grupo 5+1 (entonces formado por EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania) y la compleja situación en la que se encuentra tras la salida unilateral de Washington del pacto.
Los dos mandatarios, tras subrayar la necesidad de preservar el acuerdo y su total implementación, han dejado claro que respetar el acuerdo es crucial para la seguridad en el mundo.
Bakú y Ereván mantienen enfrentamientos en torno a la región de Nagorno Karabaj desde que esta zona, de población mayoritariamente armenia y reconocida internacionalmente como territorio de Azerbaiyán, decidiera separarse en 1988 de la entonces República Socialista Soviética de Azerbaiyán.
Como consecuencia del reinicio de las hostilidades en esa zona disputada, cientos, quizás miles de personas, han muerto y se han destruido gran número de infraestructuras y propiedades civiles.
Irán, país vecino de las dos naciones en conflicto, desde el inicio de las hostilidades las ha llamado al diálogo. De hecho, presentó un plan para resolver el conflicto de Nagorno Karabaj.
ftm/hnb/nii/
