El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, ha anunciado este lunes la imposición de sanciones a la empresa cubana de remesas American International Services (AIS), tras acusar al Ejército de Cuba de “utilizar esta compañía para cobrar tarifas y manipular el mercado de remesas y divisas”.
Desde La Habana, el canciller Bruno Rodríguez no ha tardado en reaccionar a través de un mensaje en Twitter en el que ha censurado las nuevas medidas coercitivas de la Administración norteamericana, presidida por Donald Trump, porque lo que buscan es afectar a los cubanos.
“Rechazo las declaraciones del secretario Pompeo (...) Es una maniobra dirigida a dañar al pueblo cubano y los lazos de las familias en ambas naciones”, ha advertido Rodríguez, señalando que esta acción intensifica el bloqueo contra Cuba.
El ministro cubano de Asuntos Exteriores ha aseverado, además, que la medida de Estados Unidos solo intenta “manipular a los electores de la Florida”, cuando se acercan los comicios presidenciales en el país norteamericano, en los que Trump busca la reelección.
Más de 200 empresas cubanas conforman el listado de las instituciones con las cuales los estadounidenses no pueden hacer negocios o cualquier tipo de transacción, entre las cuales se encuentran incluso hoteles y centros recreativos.
Desde su llegada a la Casa Blanca en 2017, el magnate republicano ha impuesto varias rondas de sanciones contra Cuba, no obstante, en los últimos meses, Trump ha aumentado sus hostilidades contra la isla.
La Misión Permanente de Cuba ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) denuncia que las nuevas sanciones contra la mayor de las Antillas son una expresión de la constante agresión de Washington en sus intentos por asfixiar la economía cubana y “un tosco intento de ganar votos unas semanas antes de la elección presidencial en EE.UU.”.
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