La lucha contra la pobreza vuelve a Brasil. El presidente progresista Luiz Inácio Lula da Silva, cumple con su promesa electoral y relanzan un programa de subsidios, denominado “Bolsa Familia”, que en sus primeros dos mandatos (2003-2010) redujo las tasas de pobreza y que ahora pretende rescatar del hambre a unas 33 millones de personas.
El nuevo Bolsa Familia estará dotado con unos 33 650 millones de dólares y se calcula que atenderá a 60 millones de personas, poco más del 30 % de la población.
Sin embargo, Lula reconoció que su programa no es la panacena para todos los problemas. Señaló que el “gran desafío es que la economía vuelva a crecer, para que todos los trabajadores puedan vivir de un salario digno”, lo cual se logrará, en su opinión, con la “vuelta del Estado como inductor del proceso económico”.
El plan fue socavado por el expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro. Durante su mandato millones de personas volvieron a caer en la situación de pobreza.
El programa Bolsa Familia fue creado por Lula en 2003, durante su primer mandato. Hasta 2010 había permitido sacar de la pobreza a 40 millones de personas, y ahora el objetivo principal es erradicar el hambre, que según datos oficiales, golpea a unos 33,1 millones de brasileños.
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