El representante permanente de Irán ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Amir Said Iravani, reiteró este martes en una sesión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) sobre Siria, que el reciente terremoto devastador intensificó aún más la crisis humanitaria existente en el país levantino y la convirtió en una catástrofe humanitaria, ya que todas las infraestructuras en ese país han sido destruidas y esto afecta la capacidad de la gente para acceder a las necesidades mínimas de vida.
El diplomático persa subrayó que las terribles condiciones de la gente tras el terremoto en Siria requieren aumentar las ayudas humanitarias desde una posición neutral y bastante imparcial, dejar de lado politizar el tema o condicionar el cese de las sanciones, para asegurarse de que las ayudas humanitarias llegarán rápidamente a las personas que los necesitan.
“Las medidas coercitivas unilaterales, en clara violación del derecho internacional y la Carta de la ONU, han dificultado que el pueblo sirio acceda a sus necesidades y limitado la capacidad de las instituciones gubernamentales para proporcionar servicios básicos y mejorar el nivel de vida. Por lo tanto, expresar solidaridad sin tomar acciones específicas no es suficiente. Exigimos el fin inmediato, completo e incondicional de estas sanciones injustificadas”, agregó.
Tras haber indicado que Irán fue uno de los primeros países que envió su ayuda humanitaria tanto a Siria como a Turquía, Iravani precisó que la República Islámica continuará con sus ayudas a los pueblos afectados de los dos países.
Asimismo, sostuvo que el terrorismo sigue siendo una grave amenaza para Siria y la región, y debe ser frenado firmemente. Al respecto, señaló que la presencia ilegal de las fuerzas extranjeras en Siria, que viola la Carta de las Naciones Unidas y las leyes internacionales, es la principal fuente de la inseguridad en este país.
“Se debe acabar con el continuo saqueo de los recursos naturales de Siria por parte de las fuerzas extranjeras, que ha provocado una grave escasez de combustible y empeorado las condiciones humanitarias. Según el anuncio del Gobierno sirio, tales acciones criminales han llevado al robo de más de 100 mil millones de dólares de recursos y riqueza nacional, principalmente en forma de petróleo y gas”, criticó el funcionario iraní.
A medida que continúan los esfuerzos de rescate en Siria luego de los devastadores terremotos del 6 de febrero, aumentan los llamados a EE.UU. y sus aliados europeos para que eliminen sus sanciones, que obstaculizan los esfuerzos de ayuda internacional en el país.
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