Un grupo de las fuerzas especiales del Ejército iraquí ha entrado en el edificio donde se hallaba el centro de mando de Daesh en el casco antiguo de la ciudad norteña de Mosul, ha informado este martes el comandante de la Policía Federal iraquí, el general Raed Shaker Jawdat.
Anteriormente, el Ejército iraquí había anunciado que había cercado el centro de mando del EIIL después de tomar una zona norteña densamente poblada del casco antiguo llamada Al-Shifa, en la que se encuentran los principales hospitales de la urbe iraquí.
Según la información proporcionada por la agencia británica de noticias Reuters, la caída de Al-Shifa significa que el casco antiguo en la mitad oeste de Mosul ahora está rodeado por las fuerzas gubernamentales desplegadas en el norte, oeste, sur y este.
Por su parte, el teniente general Abdul Ghani al-Asadi, comandante de las Fuerzas Antiterroristas de Irak (CTS, por sus siglas en inglés), ha precisado la jornada de hoy que las fuerzas iraquíes han podido liberar varias zonas de la Ciudad Vieja tras feroces combates con los extremistas takfiríes.
Tras declarar que la batalla está avanzando, conforme a lo planeado, pese a los lentos progresos, el alto mando castrense iraquí ha añadido que las fuerzas iraquíes han logrado rescatar a varios civiles que escapaban mientras tenía lugar la ofensiva contra la Ciudad Vieja de Mosul.
Desde octubre de 2016, las fuerzas iraquíes han lanzado importantes operativos contra el bastión más grande del EIIL en su territorio, la ciudad norteña de Mosul, y contra las regiones aledañas, en un intento por acabar con la presencia terrorista en su suelo.
El pasado jueves, militares iraquíes reportaron que la banda ultrarradical se encuentra atrapada en el 1 % del territorio que controla de Mosul.
De acuerdo con estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), aun permanecen en las áreas bajo yugo terrorista en Mosul cerca de 100.000 civiles, que son utilizados como escudos humanos para frenar el avance de las tropas gubernamentales.
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