"Esperamos que el tema del programa de defensa de Irán [...] no sea utilizado como un pretexto para los juegos políticos" a fin de "provocar nuevas tensiones", ha recalcado este martes el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif, en una rueda de prensa con su par francés, Jean-Marc Ayrault, en Teherán, capital iraní.
Zarif se ha referido a las pruebas de misiles balísticos de Irán y ha dejado en claro que la cuestión del programa de misiles no es parte del acuerdo nuclear conocido como el Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés) y tampoco viola la resolución 2231 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) que lo ratificó.
Esperamos que el tema del programa de defensa de Irán [...] no sea utilizado como un pretexto para los juegos políticos" a fin de "provocar nuevas tensiones", ha recalcado el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif.
“Esta resolución alude a los misiles balísticos que pueden portar armas nucleares y hemos declarado que ninguno de nuestros misiles balísticos está diseñado para llevar cabezas nucleares. Nuestros misiles están concebidos para portar cabezas convencionales y servir en la línea de la defensa legítima de la República Islámica, quedando así fuera del alcance de la resolución 2231”, ha subrayado el canciller iraní.
Zarif ha resaltado, además, que todas las partes participantes en el acuerdo nuclear, incluidas Francia y la anterior Administración estadounidense, han atestiguado que las pruebas de misiles de Irán no tienen nada que ver con el acuerdo nuclear.
Pese a ello, ha alertado que Irán no necesita el “permiso de nadie para defenderse”, cosa que en los últimos 250 años no ha requerido hacer. Según Zarif, Irán nunca apunta sus armas contra nadie más que contra agresores extranjeros.
Funcionarios estadounidenses e israelíes han señalado que Irán realizó recientemente una prueba de misiles balísticos, sin embargo, Irán no ha confirmado tal prueba.
Ante este panorama, Estados Unidos pidió una reunión urgente del CSNU para este martes, afirmando que la supuesta prueba desafiaba las resoluciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), una alegación que ha sido rechazada por el Gobierno ruso.
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