• Guaraní: Oposición boliviana sabe que Áñez testificará en su contra
Publicada: sábado, 2 de octubre de 2021 2:04
Actualizada: sábado, 2 de octubre de 2021 2:24

El silencio de la comunidad internacional ante el golpe de Estado en Bolivia se debe a su participación descarada en el hecho, indica un analista.

Los bolivianos han vivido días de luto, desaliento, persecución política, tortura, violación de derechos humanos, y la comunidad internacional se ha mantenido callada, no ha denunciado estos hechos”, criticó el viernes el vicepresidente de Bolivia, David Choquehuanca.

En su visita oficial a España, el titular boliviano también criticó que algunos medios de comunicación tergiversen o descontextualicen declaraciones de líderes bolivianos con el fin de crear confusión sobre lo que ocurre en el país andino.

Al respecto, el analista internacional Luis Guaraní hizo hincapié la misma jornada, en una entrevista concedida a la cadena HispanTV, que “este silencio cómplice de la comunidad internacional se debe fundamentalmente a su participación descarada”.

 

En este sentido, remarcó que los opositores exigen la liberación de la presidenta del gobierno de facto, Jeanine Áñez, debido a que saben que finalmente ella va a testificar en su contra.

Ante tal situación, el experto aseveró que la petición de tanto el Gobierno del país, presidido por Luis Arce, como de la nación boliviana es que se rindan cuentas por el golpe de Estado.

En su discurso ante el 76.º periodo de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), el jefe de Estado de Bolivia, Luis Arce, responsabilizó a actores internacionales, entre ellos la Unión Europea (UE), el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, por el golpe de Estado ocurrido en 2019.

En este sentido, el Ministerio boliviano de Asuntos Exteriores confirmó el jueves, mediante un comunicado, las declaraciones del mandatario. “Estos hechos se encuentran en proceso de investigación por las autoridades competentes, lo que permitirá identificar el grado de responsabilidad de los actores nacionales e internacionales que hubiesen participado”, se lee en el texto.

Tras la reelección del expresidente Evo Morales en las Presidenciales de 2019, Bolivia se enfrentó con una ola de caos y agitación, ya que la oposición no reconoció el resultado e inició una serie de protestas, con el apoyo de los altos mandos policiales y militares. Asimismo, las fuerzas del orden reprimieron fuertemente con armas y agentes químicos las protestas contra el gobierno de facto. La represión policial y militar dejaron unas 36 víctimas fatales, más de 800 heridos y 1500 detenidos.

Ante tal situación, Morales tuvo que renunciar y salir del país para evitar más derramamiento de sangre en las calles.

Fuente: HispanTV Noticias

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