En un discurso ofrecido este jueves en una ceremonia conmemorativa, Al-Houthi ha señalado que Estados Unidos usó el 11 de septiembre de 2001 como excusa para un ataque a gran escala con el fin de dominar al mundo islámico.
El titular yemení ha declarado que Washington recurrió a la acción militar después de no poder tomar el control de Yemen políticamente. Al respecto, ha indicado que Estados Unidos lanzó seis rondas de guerra contra el país árabe entre 2004 y 2010.
“Empezamos a luchar contra los complots de EE.UU., ya que era nuestro derecho humano, nuestro deber religioso”, ha apostillado destacando que la resistencia comenzó con capacidades limitadas en Yemen.
Al-Houthi ha denunciado que Estados Unidos apunta contra otras naciones en todas las áreas, incluidas la política, la economía, la defensa y la cultura, y busca tener bases militares en toda la región de Asia Occidental para ejercer su hegemonía.
De este modo, ha arremetido contra ciertos Estados regionales por aceptar la hegemonía de EE.UU. e Israel y colaborar con ellos. En este contexto, ha alertado que los enemigos están tratando de convertir al enemigo israelí en una herramienta directa de Estados Unidos y Occidente en la región, y eliminar causa palestina.
El líder de Ansarolá ha criticado que los países que se acercan a Israel incluso niegan las atrocidades que este régimen comete contra los palestinos. “Aquellos que busquen complacer a EE.UU. e Israel siguiendo sus políticas, enfrentarán repercusiones”, ha advertido.
Al-Houthi ha enfatizado que el enemigo israelí es una amenaza para toda la nación musulmana, pues ha urgido a actuar sabiamente frente a las conspiraciones enemigas. “La resistencia es el único camino que conducirá a la victoria contra los enemigos”, ha aducido.
La agresión contra Yemen, el país más pobre del mundo árabe, comenzó en marzo de 2015, con el inicio de una campaña de bombarderos y bloqueo de Arabia Saudí y sus aliados, bajo el pretexto de restaurar en el poder al fugitivo expresidente yemení Abdu Rabu Mansur Hadi.
No obstante, últimamente, los países agresores han sufrido duros reveses en los ataques de represalia de las fuerzas yemeníes, por lo que se han visto obligados a retirar sus tropas de varias regiones.
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