• Un soldado de las fuerzas gubernamentales de Yemen observa al resto de su guarnición en una operación militar en la provincia yemení de Al-Bayda. (Foto: IslamTimes)
Publicada: viernes, 1 de octubre de 2021 0:31
Actualizada: viernes, 1 de octubre de 2021 1:49

A medida que se acercan las fuerzas yemeníes para tomar el control de la ciudad de Marib, los mercenarios de la coalición invasora saudí están huyendo de la zona.

Según informa este jueves Yemen News Portal, un importante grupo de mercenarios, leales al expresidente fugitivo yemení Abdu Rabu Mansur Hadi, y efectivos de la coalición agresora, liderada por Arabia Saudí, están abandonando a toda prisa Marib ante el imparable avance de las tropas del Ejército de Yemen hacia esta ciudad.

El medio señala que también los familiares de los leales al régimen de Riad están evacuando la ciudad de Marib, situada en la provincia homónima en el centro-oeste de Yemen.

 Además, el reporte anota que, en los últimos días, algunos de los comandantes de las fuerzas mercenarias han estado trasladando a sus familias a Turquía, Egipto y Omán.

 

De acuerdo con Yemen News Portal, algunos de estos comandantes, que resultaron heridos en los enfrentamientos con las fuerzas gubernamentales y los combatientes del movimiento popular yemení Ansarolá, han visto la oportunidad de huir junto a sus allegados de Yemen y abandonar el país árabe para siempre. 

Como es el caso de Hussein al-Haddad, uno de los comandantes de los mercenarios que se ha enfrentado a las fuerzas del Ejército yemení en los frentes abiertos en el sur de Marib. Él ha huido con su familia a El Cairo, la capital de Egipto.

Hasta la fecha, de las 14 ciudades importantes de la región de Marib, 10 ya han sido completamente liberadas por Ansarolá y el Ejército yemení solo cuatro están aun ocupadas parcialmente por los agresores.

En los últimos días, Arabia Saudí y sus aliados están sufriendo duros reveses, así como ataques de represalia, por parte de las fuerzas yemeníes, hastiadas de la brutal campaña lanzada en su contra en marzo de 2015, cuando la monarquía árabe empezó a destruir su país con miras a restaurar en el poder a Hadi.

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