El vicecanciller para América del Norte, Alejandro Fleming, entregó la nota de protesta al encargado de negocios de EE.UU. en Caracas (capital venezolana), Lee McClenny, en la que la acción se considera un apoyo a “construir una violación flagrante del territorio patrio”.
"Fleming entregó los datos y las coordenadas de la intromisión militar y exigió una explicación oficial de los hechos que llevaron a los Estados Unidos a violar el espacio aéreo venezolano", señaló la Cancillería de Venezuela.
"Fleming entregó los datos y las coordenadas de la intromisión militar y exigió una explicación oficial de los hechos que llevaron a los Estados Unidos a violar el espacio aéreo venezolano", señaló la Cancillería.
En este mismo sentido, en la citada nota de protesta se ha dado unos datos sobre las coordenadas de la intromisión militar, exigiendo que EE.UU. diera una explicación formal frente a este nuevo hecho consistente en violar la soberanía territorial de Venezuela.
Asimismo McClenny al reconocer la incursión del avión estadounidense en el territorio venezolano, expresó su acuerdo total con Fleming, informó la Cancillería del país.
En este contexto, el ministro venezolano de Defensa, Vladimir Padrino López informó a través de su cuenta en la red social Twitter, que los altos mandos de las Fuerzas Armadas de Venezuela se reunieron la misma jornada del martes con el fin de rechazar la agresión estadounidense en el espacio aéreo de Venezuela.
A su vez, el diputado Adel el-Zabayar, del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), declaró en una entrevista con la agencia rusa de noticias, Spuntnik que la violación al espacio aéreo de otros países es lo que EE.UU. suele hacer.
Igualmente, Saúl Ortega, el otro diputado de PSUV aclaró que el reciente hecho estadounidense está relacionado con las elecciones parlamentarias venezolanas del próximo 6 de diciembre, porque “quieren generar un clima de violencia” que le permita al presidente de EE.UU. (Barack) Obama activar su decreto del pasado mes de marzo en el que consideró el país venezolano como una amenaza para la seguridad nacional del territorio norteamericano.
El 6 de noviembre, las fuerzas de defensa venezolanas identificaron un avión de Inteligencia de la guardia costera de EE.UU., tipo Dash 8, cuando se aproximó por el noroeste del país. Dos días después, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró que su país denunciaría las nuevas provocaciones militares de EE.UU. ante las instancias internacionales.
Las injerencias de Washington, según afirman las autoridades venezolanas, han aumentado en el país sudamericano de cara a las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre, y Caracas cree que todo se trata de un intento de la Casa Blanca de incitar a la violencia en Venezuela y socavar los comicios, con la ayuda de la oposición.
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