El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, dio a conocer el miércoles un informe en el que acusa a la Corte Penal Internacional (CPI) de no actuar frente a las supuestas violaciones de los derechos humanos en Venezuela.
El jefe de la Diplomacia venezolana no ha tardado en reaccionar, haciendo hincapié en que, con estas “difamaciones”, Almagro busca cuestionar el trabajo de la CPI.
“El individuo que funge como Secretario General de la anquilosada OEA no pierde oportunidad para mostrar su desprecio por los derechos humanos y aplicar un descarado doble rasero selectivo, con fines meramente intervencionistas”, ha manifestado este jueves Arreaza en Twitter.
Según el artículo 42 del Estatuto de Roma, ha apostillado el canciller venezolano, los miembros de Fiscalía de la CPI no solicitarán ni cumplirán instrucciones de fuentes ajenas a este cuerpo, y además, tales acciones violan la carta constitutiva de la OEA.
Arreaza ha subrayado también que el informe constituye “una evidente operación de propaganda” contra las autoridades y las instituciones venezolanas, y al mismo tiempo muestra “la infeliz y recurrente práctica del desgastado” de Almagro para empañar la imagen de Venezuela en el mundo.
Ha enfatizado, asimismo, que la OEA no posee “competencia jurisdiccional” para erigirse como un tribunal internacional de derechos humanos, mucho menos con respecto a Venezuela.
Tachando a Almagro de “sicario” de la OEA, ha asegurado que estos esfuerzos tienen como objetivo “generar caos y violencia” de cara a las elecciones del próximo 6 de diciembre, sin embargo, Arreaza ha recalcado que el pueblo venezolano impedirá cualquier esfuerzo que busque intervenir en asuntos internos del país.
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