El dos veces candidato presidencial Henrique Capriles rompió con la línea de la mayoría opositora de boicotear las elecciones parlamentarias, previstas para el próximo 6 de diciembre, y llamó el miércoles a movilizarse para dichos comicios, profundizando de este modo las fracturas y la crisis registradas en el seno de la oposición venezolana.
“Le quiero anunciar al país que no los vamos a dejar sin opciones. No le vamos a regalar a [presidente de Venezuela Nicolás] Maduro la Asamblea Nacional ni le vamos a regalar nada. Nos la tendrá que arrebatar”, insistió el también exgobernador del estado venezolano de Miranda durante una alocución que ofreció por las redes sociales.
Al llamar a la población venezolana a “movilizarse y luchar” para los próximos comicios parlamentarios, el político derechista, de 48 años, planteó que van a “pelear por las condiciones” con la esperanza de que sus acciones sirvan para “salvar al país”.
Asimismo, sostuvo en su transmisión que su decisión no implica “legitimar” el mandato de Maduro, con quien una mayoría de los grupos opositores del país sudamericano tiene una pugna abierta al no reconocer su reelección en mayo de 2018.
“El trabajo de un líder no es decirle a la gente lo que tiene que hacer, es cuidar a su gente”, subrayó la figura opositora en clara referencia a la insistencia del otro líder opositor Juan Guaidó para que los venezolanos se abstengan de participar en las elecciones y acompañar la decisión de su grupo de boicotearlas.
Capriles aseguró que hay que aprovechar de la oportunidad que les brinda las venideras elecciones parlamentarias para apuntalar las posiciones opositoras. En este sentido, enfatizó “la pelea es peleando, no tuiteando” para luego pedir a la Unión Europea (UE) y a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que acudan como observadores a la cita electoral, tal y como les ha invitado el mandatario bolivariano.
El referido distanciamiento entre las diversas fracciones opositoras se produce luego de que Capriles y el diputado Stalin González hayan entablado diálogos con el Gobierno socialista de Maduro, con mediación de Turquía, sobre una posible participación de la oposición en los futuros comicios, un planteamiento similar al que fue pionera María Corina Machado, máxima dirigente del movimiento político Vente Venezuela, que rechazó sumarse al boicot electoral de Guaidó.
De hecho, las conversaciones entre el Ejecutivo de Caracas y la oposición dieron sus primeros frutos el lunes, cuando Maduro facilitó la liberación de más de 100 opositores mediante un indulto presidencial.
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