Algunos presidentes de América Latina intervinieron durante el 78.º período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU).
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, en su discurso, insistió en la urgencia de una reforma en el Consejo de Seguridad de la ONU.
A su vez, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, alertó sobre las crisis que atraviesa la humanidad, como la migración desde el sur hacia el norte, y llamó a terminar las guerras, la crisis climática y el capitalismo, entre otros problemas.
Por su parte, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, denunció el bloqueo y la guerra económica extraterritorial de EE.UU. contra La Habana.
Y el presidente de Bolivia, Luis Arce, afirmó que la gran mayoría de los países del mundo están convencidos de la necesidad de construir un nuevo orden mundial.
Arce además lamentó que la crisis capitalista, que denunció, sigue poniendo en riesgo a la humanidad y a la existencia misma del planeta.
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