"Cerca de 70.000 personas quienes han huido por la crisis, han llegado a Yibouti, Etiopía, Somalia y Sudán y otras 44.000 han llegado a Arabia Saudí y Omán", indicaron el martes el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en un comunicado.
Refugiados y migrantes que llegan después de largas horas de viaje por el mar, están muchas veces traumatizados y agotados, mientras que tienen pocas pertenencias, y necesitan urgentemente alimentos, agua y atención de emergencia", explicó un alto responsable de la OIM, Ashraf El Nour
"Refugiados y migrantes que llegan después de largas horas de viaje por el mar, están muchas veces traumatizados y agotados, mientras que tienen pocas pertenencias, y necesitan urgentemente alimentos, agua y atención de emergencia", explicó un alto responsable de la OIM, Ashraf El Nour.
"Lo más urgente es responder a sus necesidades básicas, registrarles y facilitarles documentos de identificación para que puedan tener acceso a servicios esenciales", añadió, durante una reunión celebrada en Nairobi, capital de Kenia, para coordinar la respuesta a esta crisis.
A finales del pasado marzo, Arabia Saudí emprendió sin el aval de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), pero con la luz verde de EE.UU., una campaña militar contra Yemen, en un intento por eliminar de la esfera política al movimiento popular Ansarolá y por restaurar en el poder al fugitivo expresidente Abdu Rabu Mansur Hadi, fiel aliado de Riad.
Antes del conflicto, Yemen albergaba a unos 250.000 refugiados procedentes de los países vecinos, como Somalia y Etiopía. Como consecuencia del conflicto, más de 20.000 somalíes regresaron a su país.
Según las últimas cifras anunciadas por la Coalición Civil de Yemen, al menos 6090 yemeníes —entre ellos, 1698 niños y 1038 mujeres—, han perdido la vida y unos 13.552 han resultado heridos como consecuencia de la agresión saudí.
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