La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, ha hecho este jueves un llamamiento a los países de América Latina para que “reflexionen” acerca de la situación en Venezuela y, concretamente, sobre la política de “demolición” que Estados Unidos está proyectando al respecto.
“Lo que está pasando en Venezuela es muy alarmante. La línea de demolición de los gobiernos no deseables persiste en Estados Unidos como una de las prioridades en relación con América Latina y otras regiones”, ha afirmado Zajárova en declaraciones recogidas por la cuenta oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores en Twitter.
En su manifiesto, la Cancillería señala que el proyecto de resolución de EE.UU. sobre Venezuela, —que se votará este mismo jueves en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU)—, contiene solo ultimátum y demagogia.
Los miembros del Consejo de Seguridad tendrán que votar dos resoluciones sobre Venezuela, una propuesta por Estados Unidos, demandando elecciones presidenciales y otra planteada por Rusia, que respalda al mandatario Nicolás Maduro.
Hacemos un llamado a todos nuestros amigos latinoamericanos, independientemente de qué posición mantienen actualmente respecto al Gobierno legítimo de Nicolás Maduro, para que reflexionen sobre ello”, declara la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, en rechazo a la política demoledora de EE.UU. contra Caracas.
El borrador estadounidense, avanzado por los medios, pide el inicio de “un proceso político pacífico” en Venezuela que conduzca a unas elecciones presidenciales “libres, justas y creíbles”, al considerar que las del pasado mayo, cuando Maduro salió reelegido, no lo fueron. Asimismo, el texto solicita al secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, que use sus “buenos oficios” para asegurar ese proceso electoral y llama a evitar un mayor deterioro de la “situación humanitaria”, permitiendo un suministro de asistencia sin trabas para todos aquellos que la necesitan.
Por su parte, el documento patrocinado por Rusia “reafirma el papel primordial del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela en la iniciación, organización, coordinación e implementación de esfuerzos e iniciativas de asistencia internacional dentro de su territorio nacional, y recuerda que dicha asistencia debe prestarse con el consentimiento y sobre la base de una apelación del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela”.
A través de dicha resolución, pendiente de su aprobación, “hacemos un llamado a todos nuestros amigos latinoamericanos, independientemente de qué posición mantienen actualmente respecto al Gobierno legítimo de Nicolás Maduro, para que reflexionen sobre ello”, ha subrayado Zajárova.
Además, la portavoz ha resaltado que Rusia está dispuesto a contribuir a un diálogo inclusivo en Venezuela y reafirma su rechazo al uso de la fuerza extranjera para resolver la crisis.
Venezuela enfrenta días de quebranto, desde el 23 de enero, cuando Juan Guaidó, jefe de la Asamblea Nacional (de mayoría opositora y en desacato desde 2016), se autoproclamó presidente interino del país. EE.UU. reconoció al golpista e inició una recia campaña para derrocar a Maduro. Bolivia, Cuba, Rusia, entre otros países han advertido de que Washington ha incluido la opción militar para Venezuela.
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