El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, explicó el lunes a su homólogo estadounidense, Rex Tillerson, que una escalada de tensiones que acabe en violencia en la península coreana es “inadmisible”, informa la agencia de noticias Sputnik.
En este contexto, subrayó que los continuos preparativos militares de Estados Unidos en la región podrían desencadenar un nuevo foco de conflicto bélico, y el Kremlin lo ve inadmisible.
Por ello, el jefe de la Diplomacia rusa llamó a resolver las disputas entre EE.UU. y Corea del Norte por la vía diplomática.
En la península coreana, el aumento de tensión es más que evidente en los últimos meses debido, por una parte, a los ensayos de armas nucleares y de misiles balísticos de Pyongyang y, por otra, al despliegue del sistema de defensa antimisil estadounidense THAAD (sistema de Defensa Terminal de Área a Gran Altitud) en Corea del Sur y a las periódicas maniobras militares de Seúl y Washington en la región.
Además, el presidente de EE.UU., Donald Trump, no descarta una intervención militar en Corea del Norte, porque, a su juicio, solo así se frenaría en seco el programa nuclear de dicho país.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) aprobó por unanimidad el 11 de septiembre una resolución que endurece las sanciones contra Corea del Norte, en particular en el ámbito de los hidrocarburos, en respuesta al sexto ensayo atómico llevado a cabo el 3 de septiembre por Pyongyang.
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