“Todos los Estados deben cumplir con sus obligaciones jurídicas e internacionales en la lucha contra el terrorismo y llevar a cabo las medidas pertinentes, entre ellas la persecución y la extradición de los autores de los atentados terroristas”, dijo el lunes el representante permanente de Irán ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Qolamali Joshru.
Todos los Estados deben cumplir con sus obligaciones jurídicas e internacionales en la lucha contra el terrorismo y llevar a cabo las medidas pertinentes, entre ellas la persecución y la extradición de los autores de los atentados terroristas”, dijo el representante permanente de Irán ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Qolamali Joshru.
Hablando como presidente rotativo del MNA ante una sesión del Comité Jurídico de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), el funcionario iraní precisó que el término ocupación y “los actos inhumanos de los ocupadores también deberán conocerse y ser condenados como la peor forma del terrorismo”.
“El MNA rechaza todo tipo de amenaza contra sus miembros so pretexto de combatir el terrorismo y pide no igualar el terrorismo con el derecho legítimo de contrarrestar la ocupación y el colonialismo”, precisó Joshru.
Además dijo que “el uso de la fuerza por parte de los ocupadores contra las naciones que luchan por su liberación y contra la ocupación extranjera, merece una condena (internacional)”.
El MNA rechaza todo tipo de amenaza contra sus miembros so pretexto de combatir el terrorismo y pide no igualar el terrorismo con el derecho legítimo de contrarrestar la ocupación y el colonialismo”, ha precisado Joshru.
Las declaraciones del diplomático iraní se realizan en medio del aumento de los actos violentos israelíes para reprimir las protestas del pueblo palestino que han cobrado la vida de decenas de personas y han dejado varios heridos. Todo comenzó a finales de septiembre con choques en la Mezquita Al-Aqsa, desde donde se han extendido.
En medio de la espiral de tensión entre palestinos e israelíes, el primer ministro del régimen de Israel, Benyamin Netanyahu, prometió el pasado 5 de octubre reprimir con mano de hierro las marchas palestinas que denuncien las políticas racistas israelíes en Cisjordania y en Al-Quds, así como a los palestinos —a los que consideró terroristas— que ataquen a colonos israelíes.
Joshru exigió “no vincular el terrorismo con alguna nacionalidad, tribu, secta o una región específica” y resaltó que todos los actos terroristas deben ser condenados por violar las normas humanitarias e internacionales.
El MNA pidió además a todos los Estados abstenerse de proveer asistencia política, financiera, logística y espiritual a los terroristas e involucrarse en un combate efectivo contra este nefasto flagelo, concluyó el diplomático persa.
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