En una acción sin precedentes, la mayoría de delegados de diversos países del mundo ha abandonado este viernes el salón de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU), mientras que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, comenzaba su discurso.
En este momento, las fotos de los niños iraníes asesinados por Israel durante la guerra impuesta de 12 días en el pasado junio se convirtieron en testigos silentes de los infundios de Netanyahu.
Ante esta tesitura, el portavoz de la Cancillería de Irán, Esmail Baqai, mediante una publicación en su cuenta de X, ha afirmado que “estas imágenes mostraron a inocentes niños iraníes que representaban a la ‘nación iraní’”.
Ha señalado que ellos revelaron al mundo el verdadero rostro del criminal israelí, “quien con total desvergüenza se jacta de sus crímenes”.
“¿De verdad, cómo es posible que un criminal de guerra perseguido se presente ante el foro más prestigioso del mundo, mire a los ojos de la comunidad internacional y continúe su campaña de desinformación y engaño para justificar el genocidio, la agresión y la instigación de conflictos?”, ha planteado esta pregunta.
La guerra de 12 días estalló el 13 de junio, cuando Israel lanzó una agresión sin motivo contra el país persa, atacando instalaciones militares, nucleares y civiles en Teherán y otras ciudades.
Durante este momento, 1064 personas, incluidos 126 mujeres y 47 niños, cayeron mártires por la agresión israelí.
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