“Cualquier ataque a Al-Quds desencadenará una guerra regional”, afirmó el martes Jaled al-Batash, miembro del Buró Político del movimiento Yihad Islámica Palestina, según recoge el rotativo Al-Quds Al-Arabi.
En el caso de tal provocación, ha proseguido, los grupos de la Resistencia regionales usarán sus armas y lanzacohetes para luchar contra el agresor “en todos los escenarios”.
Al-Batash también ha recordado al régimen sionista las capacidades de la Resistencia para defender la ocupada ciudad de Al-Quds, y se ha referido a la Operación ‘Espada de Al-Quds’ —llevada a cabo por los grupos de la Resistencia contra las fuerzas israelíes en pasado mayo— indicando que esta operación fue un desarrollo estratégico en el conflicto con el régimen de Israel y “llevó a la región a [experimentar] nuevas ecuaciones”.
Con todo esto, ha hecho hincapié en la importancia de que los palestinos preserven y fortalezcan su solidaridad, describiendo la unidad palestina como un medio legítimo para defender los derechos de la nación.
Desde el 10 de mayo, el mundo fue testigo de otra escalada de violencia de Israel contra los palestinos en la Franja de Gaza, en la que, según el Ministerio de Salud gazatí, más de 260 palestinos, entre ellos 66 niños y 40 mujeres, perdieron la vida.
A pesar de las reiteradas advertencias de la Resistencia palestina a Israel para poner fin a sus agresiones, el régimen ocupante no detuvo sus acometidas. Por lo tanto, la Resistencia palestina, en el marco de la operación ‘Espada de Al-Quds’, dio una lección inolvidable a Israel y respondió con miles de cohetes y misiles a esta agresión de 11 días, obligando a Israel a aceptar un cese el fuego “sin condiciones” con los grupos de la Resistencia palestinos en el enclave costero, por mediación de Egipto.
Según la Resistencia palestina, ese paso de Israel equivalió a “admitir el fracaso y huir del campo de batalla”, donde fue humillado por los grupos palestinos más unidos que nunca.
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