A través de un comunicado emitido este lunes, HAMAS ha reaccionado a la decisión de la policía israelí que esta misma jornada anunció la cancelación de la llamada ‘marcha de bandera’ que los judíos extremistas planeaban realizar esta semana.
“La cancelación de la marcha constituye una nueva ruptura de los principios de Israel”, ha enfatizado HAMAS, considerando la decisión israelí como el resultado de amenazas de la Resistencia palestina.
De igual modo, la nota reza que esta medida del régimen de ocupación de Tel Aviv establece una nueva ecuación en la que la ciudad de Al-Quds (Jerusalén) “es una línea roja”.
Según el texto, la llamada marcha prevista para el próximo jueves en Al-Quds y la Mezquita Al-Aqsa resultaría en una nueva batalla para defender estos lugares santos.
La decisión de cancelar la marcha ha causado la ira de los políticos israelíes, particularmente los judíos extremistas; Bezalel Smotrich, el controvertido miembro del parlamento de Israel, ha calificado tal medida de una “vergonzosa” rendición ante HAMAS.
El evento estaba programado para realizarse en el denominado Día de Jerusalén el pasado mes de mayo, pero se suspendió debido a las preocupaciones de seguridad y las tensiones en los territorios ocupados palestinos.
Del 10 al 21 de mayo, el mundo fue testigo de otra escalada en la ofensiva militar de Israel contra la Franja de Gaza. Ante los constantes ataques de represalia de palestinos, el régimen de ocupación de Tel Aviv aceptó el 21 de mayo “sin condiciones” un cese bilateral de las hostilidades con la Resistencia palestina, que considera la tregua como un fracaso para el régimen de Tel Aviv.
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