Según muestran las imágenes, un soldado israelí le abre la puerta de un puesto de control a un trabajador palestino y de repente la vuelve a cerrar, dejándolo atrapado. La puerta entonces se abre y el hombre cae al suelo como si hubiera perdido la conciencia.
Los soldados que monitorean el paso a través de pantallas de vigilancia se ríen del palestino y uno dice: “Lo aplastó. Este tipo es estúpido”.
Este acto hostil y discriminatorio israelí ha tenido lugar en la Zona Industrial de Atarot, en Al-Quds (Jerusalén), pero se desconoce la fecha exacta en la que se produjo.
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