Según informó el lunes el rotativo israelí Haaretz, una batería del polémico sistema antimisiles Cúpula de Hierro (Iron Dome) —cuya eficacia cuestionan los expertos— fue instalada en el buque de guerra israelí INS Lahav y ya está completamente operacional.
Con esta nueva versión de dicho sistema antimisiles, el régimen de Tel Aviv busca hacer frente a posibles ataques a sus instalaciones energéticas y a las plataformas de perforación de gas en el mar Mediterráneo.
Del mismo modo, altos mandos militares israelíes aseguraron que la versión naval de la Cúpula de Hierro también esta sincronizada con las baterías instaladas en tierra.
La Cúpula de Hierro es un sistema fabricado por el régimen israelí con el apoyo financiero de Washington y tiene como objetivo interceptar y neutralizar cohetes de entre cinco y setenta kilómetros de alcance por medio de proyectiles guiados a través de radares.
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