El portal estadounidense Bloomberg, citando a fuentes familiarizadas con las discusiones entre los líderes de los países del Grupo de los Siete (G7) ―formado por Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, el Reino Unido y EE.UU.― y los miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), dio a conocer el sábado que la alianza militar pretende cambiar las armas que tiene Ucrania.
Al respecto, ha anunciado la disposición de algunos aliados de Ucrania para entrenar a los militares de este país en el manejo y uso de armas modernas, incluso fuera del territorio ucraniano.
De acuerdo con el informe, el objetivo de la OTAN es reforzar la capacidad bélica de Ucrania para poder hacer frente a Rusia en una guerra que podría alargarse meses o años.
La Cancillería rusa aseguró el viernes que la Alianza Atlántica ha cerrado filas con Ucrania para librar una guerra de poder contra Rusia. En este contexto, alertó que el bloque está prolongando el conflicto, con la estrategia de proporcionar sistemáticamente armamento y equipos militares a Ucrania.
No obstante, Moscú sigue con su operación militar en su vecino; el Ejército de Rusia ha destruido 127 aviones, 98 helicópteros, 436 aviones no tripulados (drones), 2052 tanques y otros vehículos blindados, 232 sistemas de lanzacohetes múltiples, 234 sistemas de misiles y 894 unidades de artillería de campaña y morteros de Kiev, conforme ha destacado hoy domingo el portavoz del Ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov.
Moscú ha dejado claro que no busca ocupar el territorio ucraniano, sino “desmilitarizar” y “desnazificar” Ucrania, así como evitar que la OTAN, encabezada por EE.UU., lo convierta en una base antirrusa.
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