“Paquistán, como un país con alto poderío misilístico, goza de una importante posición en el mundo del Islam. Hemos de desempeñar un papel constructivo en la creación de la unidad y la armonía en el mundo del Islam”, aseguró el domingo Musharraf.
En sus declaraciones durante una entrevista concedida a una cadena televisiva local, el exmandatario paquistaní puso énfasis en las ventajas que traerá la eliminación de las tensiones entre Teherán y Riad para Islamabad.
Paquistán, como un país con alto poderío misilístico, goza de una posición importante en el mundo del Islam. Hemos de desempeñar un papel constructivo en la creación de la unidad y la armonía en el mundo del Islam”, asegura el expresidente y exjefe del Ejército paquistaní Pervez Musharraf.
Las tensiones entre ambas partes han causado algunos problemas para Paquistán, dado que este país “es la segunda nación de mayoría chií después de Irán”, dijo Musharraf.
En febrero de 2016, el premier paquistaní, Mohamad Nawaz Sharif, y el entonces jefe de Estado Mayor del Ejército paquistaní, el general Raheel Sharif, hicieron visitas a Riad y Teherán con el fin de ofrecer mediación entre ambas partes.
Sin embargo, mientras Irán recibió con beneplácito la medida de Islamabad, Arabia Saudí hizo caso omiso a los esfuerzos del Gobierno paquistaní.
La ruptura de las relaciones diplomáticas entre Riad y Teherán —de la que culpa Teherán a Riad—en enero de 2016 se enraíza en las protestas en el país persa por la ejecución de la alta figura de la oposición saudí, el clérigo chií el sheij Nimr Baqer al-Nimr.
Irán además arremete constantemente contra Arabia Saudí por su apoyo al terrorismo y rechaza acusaciones “infundadas” de las autoridades saudíes en contra del país persa.
tqi/ctl/hnb