En un hecho sin precedentes el alcalde de la Ciudad de Guatemala Álvaro Arzú protagonizó un exabrupto cuando se leía la acusación en su contra en el edificio del Ministerio Público.
El alcalde se plantó frente a la fiscal general, Thelma Aldana, y del comisionado contra la impunidad Iván Velásquez mientras se le señalaba de utilizar recursos de la comuna para pagar publicidad maquilada por Byron Lima mediante su cooperativa dentro de un penal. Lima asesinado el año pasado era considerado el reo más poderoso de las cárceles.
No solo es el pago de publicidad para su campaña mediante recursos de la comuna sino el hecho de otorgar plazas que se pagaron pero que nunca se llegaron a cubrir.
La reacción del expresidente y alcalde capitalino fue incitar a sus correligionarios y empleados a rechazar los entes investigadores en el país como el Ministerio Público, además de declararle la guerra a Iván Velásquez.
Recientemente el presidente quiso expulsar al comisionado de Organización de las Naciones Unidas (ONU) del país, en esa oportunidad el alcalde lo respaldó y continua con la dinámica, no obstante la mayor parte de la población guatemalteca y comunidad internacional respalda a Velásquez.
La municipalidad anunció este viernes que el transmito, un medio de transporte introducido por el alcalde sufrirá un aumento del 100 por cien del valor actual, lo que analistas ven como una forma de dividir a los capitalinos respecto al Ministerio Público y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) y promover su rechazo.
A diferencia de los antejuicios planteados contra el presidente, este no lo conocerá el Congreso de la República sino un juez pesquisidor quien luego de una pequeña investigación recomendará si es viable o no retirarle la inmunidad al alcalde capitalino Álvaro Arzú.
Miguel Salay, Guatemala
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