En continuación de las tensiones por Ucrania, el viceministro polaco del Interior, Maciej Wasik, tras alegar que Bielorrusia “permite acciones extremas”, anunció el miércoles que tanto Polonia como Lituania podrían cerrar simultáneamente sus fronteras con Bielorrusia.
“Y espero que Letonia se una también, porque los lituanos deberían hablar con los letones sobre esto para lograr el completo aislamiento de Bielorrusia”, agregó Wasik.
El posible cierre de la conexión ferroviaria con Bielorrusia podría afectar significativamente el transporte de varios bienes, incluidos los productos chinos. Al respecto, el viceministro polaco sseñaló que “entendemos que una gran parte del comercio, incluido el comercio polaco, va por este camino, y el comercio chino también. Creo que los chinos deberían enviar un mensaje adecuado a (presidente bielorruso, Alexander) Lukashenko, para que no tome medidas de las que el país sufrirá”.
Asimismo, el viceministro del Interior de Polonia informó de que un total de 2000 militares se desplegarán en la frontera con Bielorrusia en el marco de las tensiones con Minsk.
Según la agencia rusa de noticias Sputnik, ahora está abierto un cruce de carreteras en Trespol, en la frontera entre Polonia y Bielorrusia, y los cruces de transporte ferroviario entre los dos países están abiertos. Sin embargo, desde 2019 no ha habido intercambio de pasajeros por ferrocarril entre los dos vecinos.
El ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu, declaró el miércoles que Polonia se ha convertido en la principal herramienta de la política antirrusa de Estados Unidos. “La acción de Polonia de comprar armas a gran escala de EE.UU., el Reino Unido y Corea del Sur plantea riesgos para Rusia”, advirtió.
Desde la llegada del Grupo Wagner a Bielorrusia como parte de un acuerdo con el presidente ruso, Vladímir Putin, Polonia ha estado alertando de los peligros a los que se enfrenta debido a la presencia de miles de fuerzas del grupo paramilitar cerca de su frontera.
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