“Todo este material atraviesa la frontera y luego sucede algo, así como que el 30 % llega a su destino final”, afirmó Jonas Ohman, el fundador y director general de Blue-Yellow, una organización que ha suministrado ayuda militar a Ucrania.
Como parte de un documental de la cadena televisiva estadounidense CBS, titulado ‘Armando a Ucrania’ transmitido el jueves, el analista declaró que la mayoría de los equipos militares de Occidente suministrados a Ucrania llegan a la frontera con Polonia, donde termina la vigilancia de EE.UU., pero solo el 70 % llega a manos del Ejército ucraniano.
De igual modo, Ohman mencionó la corrupción de los empresarios ucranianos y la “lucha por el poder durante todo el día”, como dos razones por las que no llegan todas las armas enviadas por Occidente a Ejército de Ucrania.
De acuerdo con un grupo de periodistas entrevistados en el documental, el cambio constante de la línea de frente de Ucrania dificulta el suministro de armas. También, expresaron su preocupación por la venta de armas ucranianas el mercado negro.
Desde el comienzo de la operación militar rusa en Ucrania, el 24 de febrero, EE.UU. y sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) han destinado cientos de millones de dólares al envío de armas a Ucrania.
Las autoridades rusas han advertido en varias ocasiones a los países occidentales que las armas que entregan “sin pensar” a Ucrania, podrían caer en manos de los terroristas, pero el Occidente hace caso omiso a tales advertencias.
La situación se torna más preocupante debido a informes de que neonazis, mercenarios, terroristas y otros criminales operan en las filas del Ejército ucraniano, así como que Kiev “ha perdido casi por completo la capacidad de la gestión de las administraciones regionales y distritos del país” y distribuye armas de fuego y municiones de forma indiscriminada entre la población.
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