En declaraciones ofrecidas el jueves con ocasión del inicio de la campaña electoral del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá) en Beirut, capital del país árabe, el sheij Qasem reveló la razón de que Hezbolá es blanco de ataques.
“El ataque a Hezbolá se debe a que ganó contra Israel en 2000 y frustró dos veces el plan para rediseñar Asia Occidental; una vez directamente y durante la victoria de 2006 [en la guerra de los 33 días, lanzada en su contra], y otra vez indirectamente al participar en la defensa a Siria”, argumentó.
Al respecto, precisó que la coordinación existente entre Hezbolá y el Ejército para enfrentarse a Israel y los takfiríes en el marco trilateral de ‘Ejército-nación-Resistencia’ ha sacudido a los enemigos.
El titular de Hezbolá aseveró que Estados Unidos quiere un Líbano débil, apoya el caos y la destrucción, y por eso lo ha boicoteado para que recurra al país norteamericano y implemente sus condiciones. “Resistimos, apoyamos y construimos. Estados Unidos ha sido y será derrocado”, apostilló.
La Resistencia libanesa ha presentado a varios de sus candidatos para las elecciones legislativas del próximo 15 de mayo, en las que participará con el eslogan de proteger y construir el país, azotado por la crisis económica y política que se agravó tras la mega explosión de agosto de 2020 que destruyó el puerto de Beirut.
El portal libanés Al-Ahd informó el domingo que Washington y el régimen de Tel Aviv han duplicado la creación y financiación de organizaciones no gubernamentales (ONG), cuya misión es desmoralizar al pueblo y atacar a Hezbolá, tras el fracaso del terrorismo económico, impulsado por EE.UU. contra los partidarios de la Resistencia.
Además, el Canal 12 de la televisión israelí ha llamado a los electores libaneses a derrotar a Hezbolá en las urnas. El autor del informe israelí, el comentarista Ehud Yaari, ha dicho que existen múltiples formas de influir en el resultado de las elecciones libanesas con apoyo de los estadounidenses, franceses y los países del Golfo Pérsico, incluidas asistencia financiera y asistencia profesional a las campañas electorales, y la mediación entre los políticos que tienen dificultades para ser registrados en una lista electoral.
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