“El papel de la FPNUL [Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para El Líbano] consiste en hallar una solución a estas violaciones y garantizar la estabilidad en el sur de El Líbano”, precisó el viernes el portavoz de la FPNUL, Andrea Tenenti, citado por el diario libanés Elnashra.
En la misma jornada, el Ministerio libanés de Asuntos Exteriores aseguró que se querellará contra el régimen de Israel ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) por la construcción de un muro a lo largo de la frontera libanesa, lo que supone una “violación” de la soberanía de El Líbano y una “amenaza para la estabilidad del sur de ese país y de la región”.
La denuncia se produjo después de que el régimen de Israel volviera a colocar bloques de cemento cerca de la localidad libanesa de Adaise y en distintos puntos de la llamada Línea Azul, trazada por la FPNUL en 2000 para certificar la retirada israelí de dicho territorio.
Tenenti aseguró que las fuerzas de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) siguen trabajando con el Ejército libanés para garantizar la implementación de la resolución 1701 y el respeto de la Línea Azul. “Estamos preparando informes regulares sobre las violaciones que se producen de cualesquiera de las partes”, señaló.
El papel de la FPNUL [Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para El Líbano] consiste en hallar una solución a estas violaciones y garantizar la estabilidad en el sur de El Líbano”, dijo el portavoz de la FPNUL, Andrea Tenenti.
La resolución 1701 de la ONU puso fin a la guerra entre Israel y El Líbano en 2006, que se saldó con 1200 muertos libaneses, la mayoría civiles, y 156 israelíes, mayoritariamente militares.
Beirut ha denunciado en múltiples ocasiones violaciones de su suelo y su espacio aéreo por el régimen de Tel Aviv, en operaciones de reconocimiento y espionaje: incursiones cuyo “cese inmediato” exigen las Naciones Unidas.
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