Este lunes, Kayleigh McEnany ha anunciado que contrajo el nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, por lo que va a “empezar el proceso de cuarentena y seguir trabajando por el pueblo americano a distancia”.
En Twitter, la funcionaria ha dicho que no experimenta síntomas de la enfermedad infecciosa y que desconocía que la asistente personal del presidente Donald Trump, Hope Hicks, (la primera persona en ser detectada con el virus en la Casa Blanca) la tenía.
McEnany es al menos la undécima persona cercana al mandatario que ha dado positivo por coronavirus. Asimismo, tres reporteros de la Casa Blanca han informado de su contagio.
Tras la noticia, los medios estadounidenses han publicado un vídeo de McEnany, hablando el domingo con los reporteros sin llevar mascarilla, un accesorio vital que sigue sin usarse de forma consistente en el entorno de Trump, a pesar de la larga lista de contagios en los últimos días.
El anuncio se produce tres días después de que Trump confirmó que había contraído, junto con su esposa Melania, el nuevo coronavirus.
El magnate republicano, que desde el viernes está hospitalizado en el hospital militar Walter Reed, en Bethesda (Maryland), minimizó la importancia del virus y desoyó las recomendaciones sanitarias en medio de la pandemia.
Hoy, su comportamiento se refleja en la intención de voto y a menos de un mes de las elecciones, que tendrán lugar el 3 de noviembre, varias encuestas refuerzan a su contrincante demócrata, Joe Biden, como el ganador.
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