“Según una proyección, entre 160 y 214 millones de personas en EE.UU. podrían infectarse en el transcurso de la epidemia. Eso podría durar meses o incluso más de un año (…) De 200 000 a 1,7 millones de estadounidenses podrían morir”, alerta el diario estadounidense The New York Times (NYT).
En un artículo publicado el viernes, NYT señala que la cifra de los muertos en el peor de los casos “sería asombrosa”, si no se toma ninguna medida para impedir la propagación del virus, denominado COVID-19.
Además, prosigue el informe, según las predicciones —basadas en las características del virus, su tasa de propagación y la gravedad de la enfermedad— entre 2,4 y 21 millones de estadounidenses podrían requerir la hospitalización.
Al respecto, el texto advierte que tal situación socavaría el sistema nacional de salud de EE.UU., pues, se estima que el país norteamericano solo tiene 925 000 camas de hospital equipadas. “Solo alrededor del 10 % de ellas están diseñadas para pacientes en estado grave”, agrega.
Estas advertencias se producen mientras el presidente estadounidense, Donald Trump, que ha estado en el ojo del huracán por la mala gestión del COVID-19 y ante la ola de críticas, declaró el viernes el estado de emergencia en EE.UU., pese a que venía minimizando la amenaza de la crisis por mucho tiempo.
Conforme a cifras de las agencias de salud estatales y locales y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), recogidas por la cadena norteamericana CNN, hasta la fecha, el nuevo coronavirus ha infectado a más de 2000 personas y ha segado la vida de 47 en EE.UU.
Entretanto, varios informes revelan que Washington esconde la verdad sobre el contagio del COVID-19 entre los estadounidenses. En esta misma línea, la Dra. Amy Acton, directora del Departamento de Salud de Ohio (noreste de EE.UU.), ha anunciado que hay más de 100 000 contagiados solo en el referido estado.
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