El presidente estadounidense, Donald Trump, vuelve a dar su apoyo al régimen de Israel y para ello planta cara de nuevo al consenso mundial.
El mandatario norteamericano reconoce la soberanía israelí sobre los altos del Golán sirios, una polémica decisión adoptada una semana antes de que el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, viaje a Washington, capital de EE.UU., para reunirse con él.
Netanyahu no pudo ocultar su alegría, sobre todo en momentos tan cruciales para él, que se prepara para las elecciones parlamentarias del 9 de abril y su imagen ha sido fuertemente sacudida por casos de corrupción en los que es acusado.
En 1967, el régimen israelí lanzó una guerra a gran escala contra los territorios árabes, durante los cuales ocupó una gran parte del Golán sirio y la anexó cuatro años después.
Tal hecho nunca fue reconocido por la comunidad internacional. Siria ha retirado su soberanía sobre los altos del Golán y ha señalado que estos territorios le deben ser devueltos.
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