• El secretario de Estado de EE.UU., Rex Tillerson, habla ante el comité de Relaciones Exteriores del Senado, 13 de junio de 2017.
Publicada: miércoles, 14 de junio de 2017 7:26
Actualizada: miércoles, 14 de junio de 2017 8:15

El secretario de Estado de EE.UU., Rex Wayne Tillerson, urgió el martes a contrarrestar el esfuerzo de Irán para llegar a una ‘hegemonía regional’.

En declaraciones ante el comité de Relaciones Exteriores del Senado de EE.UU., Tillerson reiteró acusaciones infundadas de su país sobre los esfuerzos de Irán para desestabilizar a Oriente Medio con la finalidad de alcanzar una hegemonía en la esfera regional.

Respaldar al presidente sirio, Bashar al-Asad, brindar ayuda financiera a las fuerzas populares en Irak y Yemen, y armar a los grupos como el Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), figuran, según el jefe de la Diplomacia de Irán, entre las medidas de Irán para expandir su influencia en la zona.

“Nosotros y nuestros aliados tenemos que contrarrestar el sueño de Irán de llegar a la hegemonía regional”, así enfatizó el titular estadounidense.

En otra parte de su discurso, Tillerson se mostró interesado en un proyecto del Senado de EE.UU. para aprobar una serie de sanciones antiraníes.

“Todavía no he hablado sobre este tema con el presidente (Donald Trump)… pero, a mi entender, (tales sanciones) son muy buenas”, adujo.

Nosotros y nuestros aliados tenemos que contrarrestar el sueño de Irán de llegar a la hegemonía regional”, así enfatizó el secretario de Estado de EE.UU., Rex Wayne Tillerson

 

El Senado de EE.UU. aprobó el pasado miércoles, con 92 votos a favor, el proyecto para imponer nuevas sanciones a la República Islámica de Irán.

El referido proyecto de Ley contempla la imposición de sanciones a las personas involucradas en el programa de misiles balísticos de Irán y a cualquier persona que haga negocios con ellas.

Dicha medida de EE.UU. en la misma jornada del doble atentado en Teherán (capital iraní), reivindicado por el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe), provocó duras críticas de las autoridades persas.

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