Nancy Pelosi, líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, junto con otros cuatro principales legisladores demócratas instaron en una carta a sus colegas a rechazar los tres proyectos de ley antiraníes del GOP (Partido Republicano), que procederán a votar este miércoles en la Cámara baja.
Si Irán continúa cumpliendo con su obligación y nos alejamos, nos vamos solos", dijo Stephen Mull, coordinador principal del Departamento de Estado de EE.UU. para la aplicación del acuerdo nuclear con Irán.
En su misiva, Pelosi y sus colegas defendieron el martes el acuerdo nuclear sellado en julio de 2015 entre Irán y el Grupo 5+1 (EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania), y lo consideraron la mejor vía para asegurarse de la naturaleza pacífica del programa nuclear iraní.
Los tres proyectos, incluido uno llamado la ‘Ley de Responsabilidad de Irán’, prevén imponer nuevas sanciones a Irán por su programa de misiles, su supuesto apoyo al terrorismo, la violación de los derechos humanos y la adquisición de Irán de "agua pesada". Las iniciativas tienen además, como objetivo bloquear el acceso de Irán al sistema financiero de EE.UU., incluyendo el uso del dólar estadounidense.
La Casa Blanca a su vez, emitió el 10 de julio una amenaza de veto sobre los tres proyectos de ley republicanos, diciendo que matarían el pacto nuclear con Irán.
Observadores del Congreso dicen que la legislación no es probable que gane suficientes votos para ser aprobado en el Senado, incluso si puede pasar por la Cámara baja. Ambas cámaras necesitarían una mayoría de dos tercios a favor de la legislación para poder anular un veto.
El martes, Stephen Mull, coordinador principal del Departamento de Estado de EE.UU. para la aplicación del acuerdo nuclear con Irán, aseguró que "no hubo acuerdo mejor que se tenía" y advirtió que una eventual ruptura del pacto por parte de EE.UU. lo va a marginar. "Si Irán continúa cumpliendo con su obligación y nos alejamos, nos vamos solos".
No obstante, a un año de la firma del pacto histórico, la República Islámica que ha cumplido con toda su parte del acuerdo, denuncia la falta de respeto de Washington con sus propias obligaciones estipuladas en el documento.
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