Mediante un comunicado, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) ha condenado “ataques ilegales” de Estados Unidos llevadas a cabo en las primeras horas de este domingo contra instalaciones nucleares pacíficas de Isfahán, Fordo y Natanz, denunciando que esta acción “criminal sin precedentes” viola la Carta de las Naciones Unidas, el derecho internacional, el Tratado de No Proliferación (TNP) Nuclear y los principios consagrados en la Carta, en particular, el respeto de la soberanía y la integridad territorial de otros países.
Esta agresión, reza la nota, puso de manifiesto que las agresiones de Israel contra el país persa, iniciadas desde el pasado 13 de junio, fueron apoyadas y planificadas por EE.UU. Conforme al texto, estos ataques muestran que el frente agresor —compuesto por EE.UU. e Israel— “no tiene el poder de la innovación ni la capacidad de evadir las respuestas contundentes de la República Islámica”.
La nota detalla que las Fuerzas Armadas de Irán han identificado el lugar desde donde volaron los aviones B2 estadounidenses para atacar sitios nucleares iraníes y lo supervisa constantemente.
El Cuerpo de Guardianes ha lanzado una advertencia explícita contra bases militares de EE.UU. en la región, diciendo que su número y diversidad “no representa un punto fuerte” para Washington, sino que “aumenta su vulnerabilidad”.
La nota ha dejado claro que “la tecnología nuclear autóctona y pacífica de la República Islámica de Irán no será destruida con ningún ataque, y esta agresión [estadounidense] solo reforzará la voluntad de los científicos jóvenes y comprometidos iraníes para desarrollarla”.
La fuerza élite iraní ha asegurado que conoce muy bien “la guerra híbrida impuesta” al país persa y “jamás se dejarán extorsionada por la retórica bélica [del presidente estadounidense, Donald] Trump y la banda criminal gobernada en la Casa Blanca y Tel Aviv”.
Ha evocado el “derecho legítimo a la autodefensa” de la República Islámica en virtud de la Carta de la ONU ante las agresiones del “régimen terrorista de EE.UU.”. Asimismo, ha amenazado al frente agresor con “opciones más allá de su imaginación y cálculos ilusorios”, y prometido una respuesta que “causará arrepentimiento” a los enemigos.
Ha subrayado que las Fuerzas Armadas de Irán, apoyadas por el frente de la Resistencia, están decididas a defender la dignidad y la seguridad del país, y vaticinado una “victoria histórica para Irán y toda la comunidad islámica”
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