“Los ejercicios de simulacro han comenzado desde este lunes y durarán cuatro días”, ha confirmado este lunes el comandante de las Fuerzas Terrestres del CGRI, el general de brigada, Mohamad Pakpur.
El objetivo de las operaciones, ha apostillado el titular castrense, es mejorar la preparación para el combate de los militares y también el nivel de las habilidades de inteligencia de las unidades.
Los ejercicios de simulacro han comenzado desde este lunes y durarán cuatro días”, confirma el comandante de las Fuerzas Terrestres del CGRI, el general de brigada, Mohamad Pakpur.
Planear nuevas tácticas y métodos de guerra, además de aumentar las capacidades de comandancia en diferentes niveles forman parte del programa de esta operación, bautizada como Imam Ali (el primer Imam de los musulmanes chiíes).
De esta manera, ha detallado que las Fuerzas Terrestres del CGRI demostrarán sus capacidades durante diversas etapas contempladas en los ejercicios.
Las Fuerzas Terrestres del CGRI hicieron otros ejercicios, denominados “Payambar Azam” o el Gran Profeta (la paz sea con él), que se desarrollaron del 12 al 14 de abril en el sureste de Irán, mayormente en la provincia de Sistán y Baluchistán.
El pasado mayo, las Fuerzas Terrestres del Ejército del país persa realizaron pruebas exitosas de los cohetes de producción nacional Nazeat y Fayr 5 de corto alcance N-6 y N-10 en las grandes maniobras de dos días de duración Beit al-Muqaddas-28, llevadas a cabo en un área desértica de la provincia céntrica de Isfahán.
En los últimos años, Irán ha logrado amplios avances en el sector de la defensa, pese a las sanciones, y es autosuficiente en la producción de equipos y sistemas militares esenciales para su sistema defensivo.
Al mismo tiempo, las autoridades políticas y militares de Irán han asegurado en repetidas ocasiones que el poderío defensivo del país no representa ninguna amenaza para otros países, ya que la doctrina defensiva de la República Islámica radica únicamente en la disuasión.
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