El volcán ha arrojado fragmentos incandescentes y se teme que las cenizas puedan caer en los alrededores. Hace una semana, Popocatépetl ya había mostrado señales de actividad emitiendo espectaculares destellos de luz seguidos por material deslumbrante que salía del cráter y bajaba por la ladera de la montaña.
En estos momentos, la nube de humo producida por la erupción está moviéndose en dirección noreste. Los vídeos de la erupción muestran una poderosa explosión y rastros de magma saliendo del cráter. Se espera una posible caída de cenizas en las áreas que rodean el volcán.
Las autoridades han informado de que el volcán Popocatépetl se encuentra en fase 2 (amarillo), lo que significa que el volcán expulsa vapor de agua y gas, se produce una ligera caída de ceniza, precipitaciones de fragmentos incandescentes, existe la posibilidad de flujos pirocláscitcos por explosiones, así como de lodo o escombros.
En las últimas 24 horas, por medio de los sistemas de monitoreo del volcán Popocatépetl, se identificaron 34 exhalaciones acompañadas de vapor de agua, gas y ligeras cantidades de ceniza. Adicionalmente se registró una explosión ayer a las 12:37” informa el Centro nacional de Prevención de Desastres de México (CENAPRED).
Lean el siguiente hilo sobre el semáforo de alerta volcánica para entender cuándo cambia.
— Volcán Popocatépetl (@Popocatepetl_MX) November 22, 2018
Seguimos en amarillo fase 2. pic.twitter.com/1alQtuSp4b
El Centro nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED) ha emitido un comunicado en el que señala que “en las últimas 24 horas, por medio de los sistemas de monitoreo del volcán Popocatépetl, se identificaron 34 exhalaciones acompañadas de vapor de agua, gas y ligeras cantidades de ceniza. Adicionalmente se registró una explosión ayer a las 12:37”.
Asimismo, el organismo “exhorta a no acercarse al volcán y sobre todo al cráter, por el peligro que implica la caída de fragmentos balísticos y en caso de lluvias fuertes alejarse de los fondos de barrancas por el peligro de deslaves y flujos de lodo”.
Según la leyenda colonial, el Popocatépetl fue un guerrero legendario llamado Popoca que, al regresar victorioso del campo de batalla, se encuentra con la inesperada muerte de su princesa amada, tras lo cual sube al pináculo del templo con ella en sus brazos, y se entregan a sí mismos como ofrendas a los dioses.
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