Sigue la escalada de tensiones entre Washington y Pekín, otra vez más por cuestiones comerciales.
La Comisión de Bolsas y Valores de Estados Unidos, en una nueva medida, aprobó una regla que le permite excluir a las empresas extranjeras de la bolsa de Wall Street si no brindan información a los auditores. Una iniciativa dirigida principalmente a las empresas chinas.
El nuevo mandato requiere en realidad que las empresas revelen si son propiedad o están controladas por un Gobierno o no. El portavoz de la Cancillería china expresó al respecto la oposición firme a trazar límites e instigar la confrontación basada en la ideología.
Lijian, asimismo, denunció que Washington con tales medidas socava la soberanía de otros países e interfiere en sus asuntos internos bajo la bandera de la competencia. Lamentó que organice bandas para contener y reprimir a países específicos. Todo eso ocurre a pesar de que el presidente norteamericano, Joe Biden, tenía en su campaña la decisión de dar un giro a las políticas antichinas de su predecesor, Donald Trump. Sin embargo, hasta el momento, las relaciones se han deteriorado en gran medida.
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