La llamada “marcha clasista” de Santiago terminó rápidamente en desastre. El ataque e incendio de un local comercial generó una represión despiadada que acabó con todo antes de empezar.
A pocas cuadras de allí, la manifestación de la Central Unitaria de Trabajadores se desarrollaba en paz. Ambos sectores denuncian los mismos atropellos a los derechos sociales.
Los trabajadores migrantes se incorporaron también. Espontáneamente, aparece la solidaridad internacionalista. En el acto central, los problemas centrales.
Alejandro Kirk, Santiago.
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