Esta precaución surge tras el asesinato de Fuad Shukr, comandante de Hezbolá, y de Ismail Haniya, jefe del Buró Político del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS).
Según reportó el periódico Israel Hayum, la defensa aérea en el norte, sur y este de los territorios ocupados ha sido puesto en máxima alerta tras las amenazas provenientes de Teherán y Beirut.
Ataques y repercusiones
El martes por la noche, el ejército israelí bombardeó un edificio residencial en los suburbios del sur de Beirut, resultando en la muerte de Fuad Shukr.
Hezbolá confirmó el asesinato de su comandante, quien desempeñó un papel crucial en la construcción y fortalecimiento del frente de Resistencia contra la ocupación sionista.
Junto a Shukr, dos niños y dos mujeres también fueron martirizados en el ataque al apartamento residencial.
En respuesta, el secretario general de Hezbolá, Seyed Hasan Nasralá, prometió una “inevitable represalia” contra Israel, jurando vengar la sangre de Shukr.
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