Según la OIM, más de 1238 personas han fallecido en su paso por los países de Centroamérica y México en 2021, entre ellas unos 51 niños. De acuerdo al informe, 728 de estos casos sucedieron en el cruce fronterizo entre Estados Unidos y México.
El organismo ha informado también que desde el 2014 hasta el viernes (29 de julio de 2022), se ha registrado la muerte de 1558 migrantes o refugiados a lo largo de su travesía.
Esta tragedia eleva a 192 el número de personas en situación de movilidad que han perdido la vida en Centroamérica y México en lo que va de este año y a 1.558 desde el 2014 hasta la fecha, según el @MissingMigrants de la OIM.
— OIM Centroamérica y Norteamérica (@OIMCentroAmer) July 29, 2022
La OIM, junto al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), ha llamado a los Gobiernos a preservar la vida y proteger los derechos de los migrantes.
“A proteger los derechos de las personas en condición de movilidad, fortalezcan las respuestas a las necesidades de protección internacional, de lucha contra el tráfico ilícito de migrantes y la trata de personas”, han reclamado en una nota.
Los dos entes han instado a las autoridades de los territorios referidos a que faciliten acceso a vías seguras y regulares para los migrantes, en especial para las mujeres, las niñas, los niños y otras personas con necesidades específicas de protección.
El 2021 fue el año en el que se registraron más muertes de personas migrantes en las Américas desde 2014. Al menos 1,238 migrantes fallecieron, significativamente más que en cualquier año anterior.
— OIM Panamá🇵🇦 (@oimpanama) July 28, 2022
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El pasado junio, encontraron 46 migrantes muertos en un camión abandonado en un área desolada cerca de una carretera en las afueras de San Antonio, en Texas, ubicado a unos 250 km al norte de la frontera entre Estados Unidos y México.
Ciertos analistas alertan que la represión de los migrantes los ha llevado a tomar las rutas más peligrosas para cruzar la frontera de Estados Unidos, o a ponerse en manos de traficantes de personas que les prometen un paso seguro, a cambio de una cantidad de dinero.
Esto, mientras que el presidente estadounidense Joe Biden, durante su campaña y nada más llegar a la Casa Blanca el 6 de enero de 2021, prometió un trato más humano hacia los migrantes y solicitantes de asilo. Sin embargo, hasta ahora no ha cumplido su palabra.
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