El petrolero ‘Faxon’, el cuarto de un grupo de buques cisterna iraníes, ha ingresado ya al Caribe, ha anunciado la agencia británica de noticias Reuters, citando datos de rastreo de los buques de Refinitiv Eikon y una fuente que habló bajo condición de anonimato.
La agencia ha señalado, además, que el Gobierno de Venezuela, presidido por Nicolás Maduro, ha comenzado los preparativos para distribuir el combustible importado entre la ciudadanía.
El mandatario chavista había informado el martes de un nuevo plan para normalizar la distribución del combustible. “En los próximos días explicaré el plan para que podamos ir —por fases— a una nueva normalidad en el campo del abastecimiento de la gasolina”, señaló.
Irán ha enviado a Venezuela cinco buques cisterna, cargados de 1,53 millones de barriles de gasolina y aditivos, para paliar la gran escasez de combustible que sufre el país caribeño a raíz de las sanciones impuestas por EE.UU. en el marco de su campaña de presión contra el Gobierno de Maduro. Hasta la fecha, tres de los petroleros han ingresado en las aguas territoriales del país sudamericano.
Las tres embarcaciones iraníes arribaron a Venezuela escoltadas por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) ante las amenazas de EE.UU. de impedir la llegada de los petroleros a las costas venezolanas.
Es la primera vez que Irán —uno de los grandes productores y exportadores de crudo del mundo— exporta combustible a América Latina, y lo está haciendo en el contexto de la alianza entre Teherán y Caracas, ambos blanco de las sanciones de Washington.
Por su parte, el Gobierno iraní advirtió, desde el principio, que respondería a una posible intervención estadounidense recurriendo al uso de la fuerza, y ha dejado en claro que el comercio entre Irán y Venezuela es propio de dos países independientes y, por tanto, este asunto no incumbe a terceros.
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