“Nosotros, que no reconocemos la arbitrariedad, que no reconocemos la sanción que se ha pretendido imponer de forma ilegal contra Venezuela, obviamente continuamos ejerciendo nuestros derechos plenamente y pretendemos hacer valer en todas las instancias esos derechos”, ha expresado el Ministerio de Exteriores venezolano por medio de una nota de prensa.
La Cartera citaba así palabras pronunciadas la víspera (jueves) por el coordinador nacional de Venezuela para Mercosur, Héctor Constant, en la sede de ese organismo regional en Montevideo (Uruguay), donde se reunió con representantes de otros países miembros —Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay— para atender la reclamación impulsada por Caracas para dialogar con sus contrapartes a través del Protocolo de Olivos de resolución de controversias.
Nosotros, que no reconocemos la arbitrariedad, que no reconocemos la sanción que se ha pretendido imponer de forma ilegal contra Venezuela, obviamente continuamos ejerciendo nuestros derechos plenamente y pretendemos hacer valer en todas las instancias esos derechos”, ha declarado la Cancillería de Venezuela.
Venezuela fue suspendida como integrante del Mercosur en el diciembre del año pasado, cuando la acusaron de incumplir los requisitos de membrecía. Las tensiones entre Venezuela y la “triple alianza de torturadores”, como ha definido el presidente venezolano a Argentina, Brasil y Paraguay, aumentaron tras la llegada al poder en Argentina del Gobierno de Mauricio Macri a finales de 2015, y en Brasil, de Michel Temer, sucesor de Dilma Rousseff.
Constant destacó que su país no reconocerá ningún tipo de acción que se emprenda en su ausencia, para luego recordar una norma muy explícita del Mercosur, según la cual ‘todas las decisiones deben ser tomadas por consenso y con la presencia de sus Estados Parte’.
Por lo tanto, Venezuela seguirá ejerciendo sus derechos plenamente en el bloque regional y pretenderá hacer valer en todas las instancias esos derechos, insistió el respresentante venezolano.
Reiteró también el interés del país bolivariano de afianzar los lazos de integración en América Latina: “nos preocupa porque queremos afianzar nuestro espacio de integración, garantizar que el Mercosur se presente frente a los socios extrarregionales como un bloque sólido, cuyo ánimo principal está en hacer valer los intereses de sus pueblos y conseguir acuerdos que sean benéficos para esos intereses”.
El Protocolo de Olivos fue firmado el 18 de febrero de 2002 en la ciudad argentina de Olivos entre los países miembros del Mercosur con el objetivo de resolver los conflictos y minimizar las diferencias entre los Estados.
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