En una entrevista concedida este martes a la agencia británica Reuters, Erdogan ha defendido los recientes bombardeos de la fuerza aérea turca contra las posiciones kurdas en el norte de Siria e Irak.
Afirma que no permitirá que la ciudad de Sinyar, ubicada en el norte de Irak, se convierta en una base de las unidades del Partido de Trabajadores de Kurdistán (PKK, por sus siglas en turco), formación a la que Ankara considera un grupo terrorista.
Debemos tomar medidas, compartimos esta información con EE.UU y Rusia, así como con Irak", ha indicado el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
Los comentarios de Erdogan se producen horas después de que los aviones de combate turcos realizaran varios ataques aéreos contra una localidad kurda, ubicada en el noreste de Siria, cerca de la frontera con Turquía, que dejaron al menos 18 muertos.
Turquía bombardeó, además, las posiciones del PKK y de sus aliados locales en la ciudad de Sinyar, en Irak, ataque en el murieron al menos seis miembros de las fuerzas de seguridad kurdas iraquíes (Peshmerga).
Erdogan, no obstante, ha lamentado la muerte de varios miembros de las milicias kurdas Peshmerga por los bombardeos en Irak y asegura que "no fue en absoluto una operación contra los milicianos de Peshmerga".
En otra parte de sus declaraciones, el jefe del Estado turco ha declarado que había informado a EE.UU., Rusia y al Gobierno de la región del Kurdistán iraquí de la operación contra los kurdos en el norte de Irak.
"Debemos tomar medidas, compartimos esta información con EE.UU y Rusia, así como con Irak", ha precisado Erdogan, agregando que el presidente de la región semiautónoma del Kurdistán iraquí, Masud Barzani, estaba al tanto de estos ataques.
Erdogan con estas palabras responde a las declaraciones del portavoz adjunto del Departamento de Estado de EE.UU., Mark Toner, quien habló de “profunda preocupación” por los ataques turcos que se llevaron a cabo "sin la coordinación” del Gobierno norteamericano.
Desde julio de 2015, Turquía realiza ataques aéreos y terrestres contra sus vecinos de Irak y Siria no coordinados con las autoridades locales, con el pretexto de luchar contra el terrorismo. Tanto las autoridades iraquíes como las sirias han denunciado la violación de su soberanía por el Gobierno de Ankara.
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